Cuando vemos un cogollo de marihuana, es difícil (por no decir casi imposible) identificar si se trata de CBD o de THC. De hecho, ambas siglas se refieren a los cannabinoides más conocidos presentes en la planta del cannabis, además de muchos otros (existen alrededor de 140).
El cannabis y el cáñamo (plantas de la misma familia) se han utilizado durante más de cientos de años en muchas civilizaciones. Si bien, ahora el auge del uso del CBD como alternativa medicinal y como uso recreativo está tomando mucho protagonismo en nuestros tiempos modernos (tal vez en 200 años se ríen de nosotros…). En cualquier caso, vamos a aclarar en este artículo las diferencias principales entre estos dos cannabinoides.
Aunque la marihuana se haya usado durante siglos, su consumo sigue siendo tabú y considerada una sustancia peligrosa. ¿Lo es realmente? ¿Qué es lo que realmente es peligroso?
Para empezar, la marihuana es un producto natural que crece en la naturaleza por sí solo. Es cierto que existen variedades sintéticas, pero vamos a centrarnos en variedades cultivadas naturalmente, como en CBD Alchemy: todas nuestras variedades provienen de cultivo orgánico en Italia.
La planta del cannabis contiene una larga lista de componentes activos presentes en sus hojas y principalmente en la flor (más conocido como el cogollo). El CBD (cannabidiol) y el THC (tetrahydrocannabinol) son componentes activos llamados cannabinoides: estos interactúan con nuestro sistema endocannabinoide, encargado de equilibrar nuestro organismo (lee más en nuestro artículo sobre dicho sistema).
El THC
El THC es un componente psicoactivo presente en la planta del cannabis.
La marihuana con altos niveles de THC se considera una “droga blanda” que proviene del secado de las flores del cannabis. Existen distintas cepas (de ahí también los distintos nombres de las variedades) y de hecho, el cáñamo suele ser más rico en CBD y el cannabis o la marihuana conocida como “tradicional”, más rica en THC.
Efectos del THC
En sus distintos modos de consumo: fumado, vaporizado, ingerido (pasteles, galletas…), infusionado, etc. la marihuana con THC provoca en general los efectos siguientes:
Euforia
Distensión
Sequedad de boca
Desinhibición
Rojez en la parte blanca de los ojos
Aumento del apetito (los famosos monchies)
Cambios de humor
Aumento de la frecuencia cardíaca (taquicardia)
Confusión
Aumento de creatividad
Alteraciones en la sensación del espacio y el tiempo
Ralentización de las habilidades motoras
Agudización de los sentidos
Posible agravamiento de síntomas psicóticos existentes
El THC actúa en el plano físico y psíquico, por eso decimos que es psicoactivo.
Los efectos mencionados pueden durar entre 3 y 6 horas aproximadamente; cada persona es distinta y estos efectos pueden variar en cada uno, por eso es muy importante escucharnos a nosotros mismos y ver cuánto conviene, si nos conviene y cómo lo vamos a tomar. Además, en el caso de la marihuana rica en THC se diferencia entre las dos variedades Indica (normalmente más relajante y buena para dormir) y Sativa (mejor durante el día, activadora).
En el CBD esta distinción es más bien irrelevante, aunque existen dominancias.
CBD
El CBD es un componente del cannabis también, que a diferencia del THC no es psicoactivo. Eso significa que no actúa en el plano psicológico, y sí en el físico, sobretodo a nivel muscular. Además, numerosos estudios confirman que ayuda a mitigar los efectos psicoactivos del THC, y a disminuir el ansia de tomar THC.
Efectos del CBD
Antiinflamatorio
Analgésico
Antioxidante
Relajante y calmante
Regulador del sistema inmunitario
Antiemético (reduce las náuseas y los vómitos)
Antiespasmódico
Hipotensor
Alivia estrés y ansiedad
Por lo general, el CBD se usa con fines medicinales por los efectos que acabamos de mencionar, y por el hecho de no ser un cannabinoide psicoactivo. El CBD tiene grandes beneficios para nuestro organismo, y por eso no hay que sufrir en ningún momento por efectos negativos. También conocido como marihuana legal, por contener menos de un 0.2% de THC, sus usuarios no corren ningún riesgo de sufrir efectos relacionados con el THC porque el porcentaje es tan bajo que no llega a tener efecto.
El único riesgo o efecto negativo de tomar CBD es en general tomarlo por inhalación con combustión, puesto que el proceso de quemado puede dañar los pulmones. Por el resto, todos los otros métodos de consumo no presentan riesgos para la salud.
¿Es entonces peligroso el consumo de cannabis CBD?
Absolutamente no. Por las diferencias mencionadas anteriormente, puedes ver que el CBD tiene unos efectos muy distintos y además, curativos para el organismo, sin dañar otras partes del cuerpo, como puede pasar con otros medicamentos. Si bien, es muy importante siempre consultar a un médico de confianza, antes de empezar un tratamiento solo con CBD, o si se toma CBD y otros medicamentos.
A modo general, siempre que tomamos alguna sustancia es importante remarcar que todas las personas son diferentes y que la dosis de cada uno puede variar. Como decía Paracelso, considerado el padre de la farmacología, la dosis lo es todo.
Diferenciar entre ambos cannabinoides es clave, ya que provienen de la misma planta, pero tiene efectos y usos muy distintos. Ahora que ya sabes sobre ambos, ¿te animas a probar nuestro CBD? Encuentra todos los productos aquí.
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